Se conoce comúnmente como guerra civil de El Salvador al conflicto bélico interno ocurrido en el país centroamericano, en el que el ejército gubernamental —la Fuerza Armada de El Salvador (FAES)— se enfrentó a las fuerzas insurgentes del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN). El conflicto armado nunca fue declarado en forma oficial, pero se considera usualmente que se desarrolló entre 1980 y 1992,10 aunque el país vivió un ambiente de crisis política y social durante la década de 1970.
El número de víctimas de esta confrontación armada ha sido calculado en 75 000 muertos y desaparecidos.1112 El conflicto armado concluyó, luego de un proceso de diálogo entre las partes, con la firma de los Acuerdos de Paz de Chapultepec, que permitió la des movilización de las fuerzas rebeldes y su incorporación a la vida política del país. No obstante, El Salvador ya había sufrido anteriormente, al menos una guerra civil, entre 1826 y 1829, cuando formaba parte de la República
Federal de Centro América.13
En 1990 las dos partes aceptaron que la guerra era interminable y que ninguna de las partes ganaría militarmente, así que el FMLN dio ofertas de paz al principio de la guerra, los cuales el gobierno rechazo o no tomaban en serio las negociaciones, pero después de la Ofensiva Hasta el tope el presidente de la
república Alfredo Cristiani y otros funcionarios del gobierno debieron de aceptar a regañadientes, se logró que la ONU oficiara de mediador en el conflicto y se iniciaron conversaciones a fin de encontrar una solución a la guerra.
Tras intensas negociaciones, la ONU diseñó un plan, a cumplirse por etapas, según el cual:
Los rebeldes debían destruir sus armas e indicar la localización de todos sus arsenales y municiones. Asimismo, debían desmovilizarse y permitir el paso de las autoridades y la policía.
El gobierno debía, por su parte, desmovilizar al ejército, la policía y desarticular a los escuadrones de la muerte.
A finales de 1991 la ONU certificó que ambos bandos habían cumplido con sus compromisos y los convocó a la firma de los Acuerdos de Paz de Chapultepec el 16 de enero de 1992 en el Castillo de Chapultepec, Ciudad de México, México. El ministro de defensa en la época del cumplimiento del Acuerdo de Paz fue el General Humberto Corado Figueroa.
república Alfredo Cristiani y otros funcionarios del gobierno debieron de aceptar a regañadientes, se logró que la ONU oficiara de mediador en el conflicto y se iniciaron conversaciones a fin de encontrar una solución a la guerra.
Tras intensas negociaciones, la ONU diseñó un plan, a cumplirse por etapas, según el cual:
Los rebeldes debían destruir sus armas e indicar la localización de todos sus arsenales y municiones. Asimismo, debían desmovilizarse y permitir el paso de las autoridades y la policía.
El gobierno debía, por su parte, desmovilizar al ejército, la policía y desarticular a los escuadrones de la muerte.
A finales de 1991 la ONU certificó que ambos bandos habían cumplido con sus compromisos y los convocó a la firma de los Acuerdos de Paz de Chapultepec el 16 de enero de 1992 en el Castillo de Chapultepec, Ciudad de México, México. El ministro de defensa en la época del cumplimiento del Acuerdo de Paz fue el General Humberto Corado Figueroa.